La doctora Jenipher Jaqueline Báez Inoa responde
La frecuencia con la que una mujer debe hacerse un examen ginecológico varía según su edad y su estado de salud. En general, se recomienda que las mujeres sanas se hagan un examen ginecológico cada año. Sin embargo, las mujeres en la menopausia o postmenopausia pueden seguir visitando al ginecólogo para tratar otros problemas de salud.
Si no hay incidencias anteriores, la primera revisión debería realizarse al inicio de las relaciones sexuales ya que la consulta de tu ginecólogo es el lugar más seguro para recibir la información personalizada que necesites y resolver dudas sobre temas de anticoncepción e infecciones de transmisión sexual (ITS).
El mejor momento para realizar la revisión ginecológica es después de tu periodo menstrual, ya que si estás menstruando no se puede realizar la toma de muestra para la citología.
¿En qué consiste una revisión ginecológica?
Comienza con una entrevista donde se recogen datos sobre la salud y la vida sexual, por supuesto, todo ello se realiza en un ambiente de confidencialidad.
Normalmente, en este primer momento nos centramos en el motivo de la visita y en completar la historia clínica ginecológica, que incluye antecedentes de salud en general; la edad de la primera menstruación, frecuencia, regularidad, tipo de hemorragias (normal, escasa, excesiva), la fecha del último período, conocer si existe dolor durante el período.
También será necesario conocer si está manteniendo relaciones sexuales para valorar la presencia de posibles infecciones, embarazo, uso de métodos anticonceptivos y recomendaciones en este sentido si se necesitan; si hay embarazos anteriores y en relación con las mamas, saber si se realiza autoexamen de mamas y su frecuencia, si existe algún tipo de dolor o alteraciones en el color, forma o posibles secreciones.
Luego de esta entrevista para elaborar la historia clínica, se podría hacer un examen abdominal con ecografía, examen clínico de mama y una exploración vulvar y vaginal, así como una citología (análisis de las células del cuello del útero y vagina) que se realizará cada 1 a 3 años, siempre y cuando no existan alteraciones. Como complemento a la citología a veces solicitamos la prueba del Papiloma Humano (HPV).
Otras pruebas que se podrían hacer es una ecografía transvaginal o transabdominal (estudio mediante ultrasonidos de los órganos reproductivos); la mamografía es una exploración complementaria que solicitamos en mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama, sin embargo, tomar en cuenta que las mamografías se recomienda realizarlas anualmente a partir de los 40 años y bianualmente a partir de los 50 años.
Si el ginecólogo/a lo considera necesario, se realizarán otras pruebas complementarias para llegar al diagnóstico.
Es importante realizar estas revisiones de forma periódica, ya que es el mejor modo de prevenir patologías y asegurarnos una buena salud. Recuerda que tu ginecólogo/a también te asesorará en salud ginecológica y reproductiva si lo deseas.
Puede consultar los horarios de la Dra. Jenipher Báez en el siguiente enlace