Miguel Angel Fabián, multiplicador voluntario del proyecto Opciones
Tiene 22 años y es estudiante de ingeniería industrial con interés en el área de teatro, comedia y que disfruta la fotografía, viene de una zona rural muy pobre.
El proyecto Atención a la Salud Sexual y Salud Reproductiva de la Gente Joven, (Opciones) realiza charlas educativas dirigidas a los y las jóvenes de distintas localidades, con información sobre la sexualidad, incluidas las formas de prevención de las Infecciones de Transmisión Sexual (ETS) y de embarazos no planificados.
Opciones desarrolla diversas actividades, como los cara a cara, que son reuniones donde se aborda directamente a los y las jóvenes en sus comunidades, distribución de volantes informativos, charlas en las escuelas y en las comunidades, así como ferias de salud.
“No tengo palabras para describir lo que Opciones ha hecho en mi vida. Es indescriptible. Me ha cambiado totalmente la vida, en especial en el arte de hablar en público, lo que me ha ayudado en mi desarrollo personal. Me he dado cuenta que lo que hace falta para cambiar el mundo es cambiar nosotros mismos” afirma convencido Fabián.
Piensa que el gobierno debería otorgarle un 4% también a programas como “Opciones” para ser ejecutados preferiblemente en zonas rurales “estos le cambian la vida para bien a cualquier joven”, asegura.
El equipo de facilitadores está compuesto por jóvenes capacitados que realizan jornadas formativas en los centros educativos, con la aprobación de las autoridades de las diferentes escuelas y liceos.
Opciones se desarrolla en cinco de las seis clínicas de Profamilia: Evangelina Rodríguez, Profamilia Herrera, Sabana Perdida, Unidad de Atención Primaria Camboya y clínica Profamilia San Francisco de Macorís.
El programa está dirigido a jóvenes y adolescentes de 10 a 24 años, así como a personas adultas que muestran interés por las actividades, y tiene como objetivo que toda la gente joven del país esté consciente de sus derechos sexuales y reproductivos, empoderada para tomar decisiones relacionadas con su salud sexual y reproductiva y sea capaz de actuar conforme a esas decisiones.
“Ofrecemos servicios prepagados para usuarios y usuarias de escasos recursos, que distribuimos en operativos de salud en comunidades rurales y bateyes. Cada clínica cuenta con 13 jóvenes como parte de la red de multiplicadores, de los que más del 70% llevan varios años como parte del proyecto”, expresó Catherine Adames, responsable del proyecto-.
Erika Santana, multiplicadora voluntaria de Opciones, expresa que el proyecto le ha beneficiado en muchos aspectos y le incentiva a explotar su capacidad y desarrollo. Considera que en el tema de los derechos sexuales y los derechos reproductivos los y las jóvenes no siempre reciben la información apropiada.
También Javier Cuevas, quien lleva 3 años en el proyecto Opciones, expresa su interés en que se abran más espacios para jóvenes y que puedan vivir la experiencia que él ha tenido de capacitarse para servir otros.