Doctora Yudelka de Mota
Ginecóloga obstetra
Clínica Profamilia Sabana Perdida
Al inicio me dije: “en este embarazo no voy a engordar mucho, como la otras veces…unas semanas después ya subí 48 libras y no estoy ni cerca de parir”.
Josefina 39 años
Durante el embarazo, la mujer debe satisfacer sus necesidades nutricionales y las de su bebé, pero no necesita “comer por dos”. La ganancia de peso es importante, pero el embarazo no ha de convertirse en una excusa para una ingesta de alimentos incontrolada, aunque tampoco para el control excesivo por miedo a perder la figura.
El tipo de alimentos que consuma la mujer embarazada es mucho más importante que la cantidad. Esta debe ser balanceada, que responda a los requerimientos de su gravidez, con un aumento gradual en la ingesta de calorías, lo que se traduce en neonatos con peso idóneo, vigorosos, con menos complicaciones perinatales y maternas.
En esta etapa del ciclo vital de la mujer se aprecia un acelerado crecimiento y desarrollo de tejidos maternos y fetales, responsables ambos de una ganancia de peso cuyos componentes pueden ser divididos en dos partes: la que se atribuye al producto de la concepción (feto, placenta y líquido amniótico) y la que responde a la expansión de los tejidos de la futura madre (aumenta el útero, mamas, volumen sanguíneo, líquido extracelular, reservas de grasa y especialmente, material nutritivo para afrontar la lactancia).
¿Aumentar de peso de forma desproporcionada representa algún riesgo?
Estar en sobrepeso u obesidad propicia las condiciones para desarrollar complicaciones como la diabetes gestacional, trastornos hipertensivos del embarazo (hipertensión gestacional, preeclampsia y sus complicaciones), entre otras, que aumentan la morbimortalidad materno-fetal, que también se puede extender hasta el puerperio y más tiempo.
¿Cuánto peso debería aumentar en este embarazo?
Es una pregunta que hacen muchas mujeres en la consulta y lo que podemos decir es que el peso ideal o recomendado durante el embarazo depende del índice de masa corporal (IMC) previo al embarazo, pero en general se recomienda un aumento de peso entre 11.5 y 16 kg (que son entre 25 a 35 libras) para mujeres con peso normal.
Las mujeres con bajo peso pueden necesitar aumentar más (12.5-18 kg o 28-40 libras), mientras que las mujeres con sobrepeso u obesidad pueden necesitar aumentar menos (6.8-11.3 kg o 15-25 libras, o incluso menos).
En todos los casos, la recomendación es que la embarazada vaya ganando peso progresivamente. En el primer trimestre el aumento es moderado, entre 0,5 y 1,5 Kg. Hay mujeres que incluso no engordan nada o pierden peso debido a la presencia de náuseas y vómitos en esta primera etapa del embarazo.
Para el segundo trimestre se recomienda un aumento entre 3,5 y 4 kg de peso, mientras que en el tercer trimestre el aumento tiende a ser mayor debido a que el feto está más desarrollando.
Para un embarazo saludable y un aumento de peso controlado, lo ideal sería tener una consulta antes el embarazo, ya que ofrece una excelente oportunidad para trazar algunas estrategias. El control prenatal sistemático guiado por un personal de la salud, junto a una adecuada dieta nutricional son puntos clave para lograr un régimen alimenticio adecuado en la gestante, que permitiría evitar un incremento excesivo de peso, reduciendo el riesgo de obesidad y, por tanto, disminuyendo los riesgos para la salud materna y neonatal.