Aunque un embarazo es un proceso normal, algunas parejas se preocupan por la salud de la madre y de la criatura en formación. Debido a los cambios que ocurren a nivel fisiológico en la mujer producto de un embarazo, es recomendable llevar ciertas directrices que contribuyan a la disminución de riesgos y complicaciones durante este período.
De manera rutinaria hacemos las siguientes recomendaciones durante las consultas prenatales, para que tenga un embarazo saludable y esta sea una experiencia feliz.
• Es recomendable evitar las bebidas alcohólicas y el consumo de otras drogas, por ser perjudiciales para su salud y especialmente para el bebe. También el tabaco es nocivo, por lo que es recomendable no fumar durante todo el embarazo.
• Extreme la higiene de la boca. Límpiese los dientes después de cada comida y acuda a su dentista si es necesario, ya que durante la gestación hay deterioro de la dentadura y aparición de molestias relacionadas con la inflamación de encías.
• Evitar tomar cualquier tipo de medicamentos durante el embarazo, a menos que hayan sido prescritos por su obstetra.
• Durante todo el embarazo la alimentación debe ser completa y variada, con aumento en la ingesta de frutas, vegetales, carnes, así como un aumento en el consumo de agua.
• Utilizar sal yodada y ácido fólico.
• Para que la futura madre se sienta más cómoda, recomendamos usar vestidos holgados, zapatos confortables, en los que evite tanto el tacón alto como el calzado excesivamente plano.
• Si está acostumbrada a hacer ejercicio, continúe haciéndolo, si no hace ejercicio, se recomienda realizar caminatas cortas y practicar la natación, si tiene posibilidad.
• No realizar viajes largos o que la puedan cansar mucho, y en caso de necesidad realizar breves paradas para movilizar los miembros inferiores, hidratarse y utilizar el baño.
• Si el embarazo cursa con normalidad no es necesario modificar o interrumpir sus hábitos sexuales, siempre y cuando no resulten molestos para la futura madre.
• Es muy importante acudir a sus chequeos prenatales con regularidad, ya que ellos permiten ir detectando cualquier anomalía a tiempo y minimizar complicaciones.
• Observar y notificar la aparición de procesos infecciosos como de la orina, vagina o sistémico, que se refiere a síntomas generales como fiebre, dolor corporal o de cabeza, diarreas, constipación, sensación de ahogo, entre otros, que nos pudieran orientar sobre enfermedades no propias ni comunes durante el embarazo
Los cambios del embarazo no tienen que impedir que esa sea una etapa placentera y feliz.